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domingo, 1 de noviembre de 2009

Como saber si un agaporni es macho o hembra

El tema del sexaje de los agapornis es complejo pues en las especies principales (personata, fischer, rosecollis, etc) no existe dimorfismo sexual, es decir, no hay NINGUNA evidencia física clara que diferencie machos de hembras en la especie, como ocurre con otro tipo de aves que muy claramente sí tienen dimorfismo sexual, como por ejemplo en los periquitos, que siendo los cereos de ciertos colores son machos o hembras, o más claramente en los verderones, por ejemplo, que el macho es mucho mas amarillo y brillante que las hembras... O como en la mayoría de los fringílidos que los machos poseen y realizan cantos y gorjeos que las hembras no hacen.

Aún así hay algunos métodos de sexaje de agapornis, para saber si tenemos un macho o una hembra, pero son poco fiables o con un porcentaje mayor o menor de acierto. Los principales métodos son:

- Tocándole los huesos pélvicos: los machos los tienen más juntos y puntiagudos (casi que "pinchan")... Las hembras, más separados y redondeados... Ahora bien: hay muchas hembras que hasta el primer celo no abren sus huesos pélvicos, por lo que pueden pasar por machos ante manos inexpertas (e incluso expertas)... Para sexar de esta forma hay que haber tocado, como mínimo, 3 millones de agapornis.

- Por tamaño y "personalidad": se dan numerosos casos en el que la hembra suele ser más grande/cabezona que el macho y son más agresivas, salvo cuando damos con una hembra mas chiquitina, con menos porte, o más tranquilota: que las hay... De hecho los últimos pollos de las nidadas (sobre todo en nidadas numerosas) al ser mas cuiquitines e indefensos reciben menos comida. Al final son siempre mas "escurridos", chiquitajos y pueden ser perfectamente hembras... Así es que, tampoco es fiable esto de que las hembras son más grandes o con más mala leche: hay hembras pequeñas y machos agresivos.

- Comportamiento sexual: si tenemos la oportunidad de tenerlos en pareja y somos observadores podremos comprobar ciertos comortamientos repetitivos que nos pueden indicar el sexo. Generalmente el macho, de manera insistente, suele regurgitar y dar de comer a la hembra (que no es lo mismo que "darse besos", que esto es más facil verlo entre machos y hembras)... A la hora de hacer el nido es la hembra la que lo hace más activamente, es ella, la que agarra y desmenzua la palmera y la introduce en el nido. El macho no colabora en (casi) nada a la hora de hacer el nido.... De hecho el macho suele entrar la mitad de veces que la hembra.


Si vamos acumulando todos y cada uno de estos principios de sexaje y van coincidiendo uno tras otro (que la supuesta hembra tiene los huesos más separados, que incluso puede ser mas grandota que el macho, que es ella la que hace más activamente el nido mientras el macho repetidamente le regurgita comida, etc.) podemos tener bastante seguridad sobre que tenemos la parejita: macho y hembra.... Pero claro: hay que ir corroborando y afirmando con seguridad cada unos de estos principios con el supuesto macho y con la supuesta hembra. Cosa que no suele ser nada fácil.

El problema radica en que no siempre se detecta el macho y la hembra, tenemos dudas, no terminamos de ver/corroborar algunos de estos principio anteriores y es entonces cuando estaremos con la duda hasta que aparezcan huevos y posteriomente pollos. Evidentemente esto indica que hay macho y hembra con 100% de seguridad.

Ahora bien: si en el nido aparecen más de 5 huevos y si son más de 7, con mayor motivo, podemos intuir el que tengamos dos hembras (siempre y cuando tengamos la suerte de que ambas hembras a la vez pongan los huevos: porque peor es el caso de que tengamos dos hembras y solo ponga una y creamos que la otra siga siendo un macho...)


Realmente esto del sexaje es algo complicado: si no estamos seguros puede ser durante mucho tiempo un mar de dudas.... Pudiendo tener, sin darnos cuenta, dos machos y dos hembras. Pueden pasar meses y meses y "aquello" no prosperar y nunca salir de la duda: ¿serán pareja?... ¿serán dos machos/hembras?...

Por eso, para un solución rápida y eficaz es sexar a nuestras aves por ADN:

Existen varios laboratorios que con un precio alrededor de 15-17 Euros por ave sexan a nuestros agapornis. Los veterinarios también lo hacen pero son mucho más caros porque deben tener ganancia como intermediarios... Por lo tanto es mejor hacerlo nosotros directamente con el Laboratorio en cuestión.

Lo que tendremos que hacer es mandar dos plumas de nuestro agapornis. Yo les mando una pluma remera de cada ala.

Para ello, tendremos que arrancársela; algo que puede resultarnos difícil o darnos miedo. Nada más allá. Es realmente fácil, el ave no sufre (ni nos coge manía). Es como cuando nos quitamos, por ejemplo, un pelo de la nariz: es ese "pinchacito" del tirón y ya está.

Lo podemos hacer nosotros solos, o si dudamos, mejor con otra persona que nos ayude. Debemos coger al agapornis firmemente (sin apretarlo, cuidado) y desplegarle el ala con seguridad (aquí puede entrar a ayudarnos nuestro compañero), y con ella desplegada y todas sus plumas remeras a la vista, debemos elegir una, agarrarla firmemente y pegar un leve tironcillo. Y ya está.

Y nuevamente con el otro ala.

No tiene más misterio.

Esas dos plumitas deben ir en una bolsita de plástico, con una etiqueta con el nombre, la especie del ave y el número de la anilla, si la tuviera. Bien identificadas esas plumas, para que no haya consfusión: sobre si todo por si mandamos más de un ave a sexar.

Suelen tardar en dar los resultados entre 10-15 días, depende del Laboratorio. Algún Laboratorio manda un kit de sexaje, con estas bolsitas y pegatinas, etc... Poneros en contacto con ellos para que os informen más.


Y poco más. Cualquier duda o añadidura sobre este tema del sexaje será bien recibido.

1 comentarios:

Danitza dijo...

En el blog diamante mandarin ya siempre será la mejor forma de cuidar a las aves.

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